"Dame mil besos, luego cien,
después mil otra vez, y de nuevo cien,
luego otros mil aún, y luego cien…
Después, cuando sumemos muchos miles,
confundamos la cuenta hasta perderla,
que hechizarnos no pueda el envidioso
al saber el total de nuestros besos."
"Lo único que se consigue mirando atrás es que te duela el cuello."
La casa de la colina negra.